El primer disco de la agrupación murguera “Legendarios de la Esquina” de Villa Pueyrredón tiene ocho canciones con la participación de invitados especiales. “Las propuestas alternativas como los streamings le sumaron calidad al carnaval y deberían seguir incluso cuando vuelvan los festejos callejeros”, asegura su actual director Hernán Bo.
Por Juan Manuel Castro
La murga de Villa Pueyrredón “Legendarios de la Esquina”, fundada en 2014, grabó este verano su primer disco de estudio, llamado “Murga y rock en las venas”. Tiene ocho canciones, compuestas a lo largo de la historia de la agrupación. “La idea la teníamos hace años, pero la pandemia aceleró las cosas”, dice su actual director Hernán Bo. “Es un sueño cumplido, es un material nuestro que va a quedar dando vueltas por todos lados”, agrega.
El espíritu que rodea el disco es el diálogo entre la murga y el rock: “Se grabó con bombo y platillo, y luego las guitarras y voces. El nombre habla sobre la convivencia de géneros, algo que forma parte de la identidad de Legendarios” cuenta Bo.
“Desde 2014 componemos nuestras propias canciones, tenemos cerca de 20. Todos los años cambiamos el repertorio. Con esto del disco hicimos canciones para incluso el próximo carnaval, que esperemos que sea en las calles”.
Este verano, por primera vez desde la vuelta de la democracia en los años ochenta, no se desarrollaron los tradicionales corsos callejeros. Fue por decisión de las agrupaciones murgueras. A cambio, le propusieron al Gobierno porteño festejos alternativos como la realización de murales, muestras fotográficas y la colocación de banderines en lugares de ensayo.
En este contexto tan atípico para la murga porteña, los Legendarios vivieron su momento de aventurarse en lo desconocido. “Estuvimos ensayando un par de lunes seguidos para aceitar y nos metimos en la Sala de Ensayo White del barrio de Villa Luro. Para los chicos fue una locura, era la primera vez que hacían algo así”, señala Bo, quien tiene varias horas de vuelo.
Por fuera de la murga que dirige y donde toca el bajo, integró como baterista la banda de rock “No tan distintos” y ahora el grupo de rock “Pieses”. Con este última ensayaba en Luro y ahí conoció a quien terminaría convirtiéndose en el productor del disco. “Sabe un montón, trabajó con Skay Beilinson, Willy Crook, un montón de grosos. Le copaba la idea, este es el primer disco de murga que produjo”, celebra el director de Legendarios.
También hay músicos invitados, entre ellos Gaba Díaz, cantante y líder de Blues Motel. “Le hice la propuesta, le mostré el tema que tenía que grabar y se prendió al toque”, celebra Bo. También son parte de este trabajo el saxofonista y luthier Mariano Fabris y el guitarrista Gastón Petrungaro, ex de “No tan distintos” y actuales en “Pieses”.
“Lo tenemos todo terminado, falta la mezcla. Hay que grabar un par de cosas y masterizar. Vamos a ver cuándo lo presentamos”, cuenta Bo. El costo de grabar y editar este disco se cubrió con rifas y dinero que los mismos murgueros pusieron de su bolsillo.
“El objetivo ahora es que esté subido a todas las plataformas posibles y también va a tener su formato físico, nos pareció importante y significativo. Es algo que va a quedar dando vueltas por todos lados y queríamos estar en todos los formatos”.
El arte de tapa estará a cargo del artista Darío Filetes, quien también hizo el diseño de un futuro mural que harán en su espacio de ensayo, la Plaza de la Estación de Villa Pueyrredón (Bolivia y San Alberto). “El duende es nuestro símbolo, nuestra bandera, así que está presente en todo nuestro material gráfico”.
Este verano las actividades alternativas mantuvieron vivo el espíritu murguero. Por caso, la muestra itinerante de fotos “No me sueltes carnaval” recorrió varias plazas y parques porteños. El objetivo era que las agrupaciones de cada barrio estén presentes el día en que llegaba la exposición.
Los miembros de Legendarios hicieron lo suyo en la Plaza Echeverría de Villa Urquiza, donde compartieron una tarde junto a colegas de Retocados de Villa Urquiza (ensayan en ese espacio verde) y Los Afortunados de Villa Urquiza.
La murga de Villa Pueyrredón también recibió una placa dentro de la actividad llamada “Huellas de Carnaval”. Bo explica: “Entre todas las murgas costeamos una serie de placas con los nombres de las murgas y filetes porteños. Son para poner en los lugares de ensayo y donde hay corsos. Cada una tiene un Código QR que te deriva a una futura página web donde está el resumen con la historia de cada murga”.
Durante febrero las murgas porteñas recibieron estas placas, a la espera de que la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires apruebe un proyecto de ley que habilite la instalación de las placas en el espacio público. En una etapa posterior está planteado colocar otras placas para dar cuenta de sitios donde ocurrieron hechos históricos vinculados a los corsos de la Ciudad.
En paralelo, las agrupaciones de carnaval hicieron “Murgales”, murales con elementos icónicos de cada grupo en sus lugares de ensaño. Como con el disco, los Legendarios hace tiempo tienen ganas de tener su propia pieza de arte en la plaza de la Estación de Villa Pueyrredón. Darío Filetes ya hizo unos bocetos y están a la espera de obtener materiales para poder concretar también este proyecto.
“Pese a la desgracia de la pandemia y no poder hacer los festejos callejeros, lo que pasó este carnaval fue un golazo. Las murgas pudieron hacer streamings (transmisiones en vivo) con una calidad audiovisual inédita. Se generó un registro impresionante de las murgas, que antes hacían videos con celulares. Esto es jugar en primera”, dice Bo.
“Nosotros estuvimos metidos con el tema del disco, así que decidimos no participar de los streamings, pero vemos que hay una calidad impresionante. Esto es un avance y hay que incorporarlo a futuro porque beneficia a todas las murgas”.
Y agrega: “Cuando las agrupaciones de carnaval le planteamos al Gobierno porteño que no era seguro hacer los festejos callejeros hicimos muchas propuestas y algunas quedaron. Una de las que no se aprobó fue la de hacer radios abiertas, porque existía el riesgo de que haya aglomeraciones. Ojalá a futuro si se puedan implementar”.
“Estaría bueno que todo lo que se implementó este verano, que fue tan positivo y un salto de calidad tan grande, quede a futuro cuando vuelvan los carnavales callejeros”, concluye Bo.
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