Fuerte ajuste en “Cultura en Barrios”

Murales para la Ciudad
El Gobierno porteño efectuó un fuerte ajuste en el presupuesto del programa “Cultura en Barrios”, una política de estado que cumplió 40 años en la Ciudad de Buenos Aires. Este programa tiene como objetivo fomentar las actividades culturales locales. En la Comuna 12 hay tres sedes que ven afectada la subsistencia de muchas de sus propuestas. El Centro Cultural Discepolín no podrá continuar con “Murales por la Ciudad”

Por Mateo Lazcano
Urquiza se Organiza

Como un fiel alumno de Javier Milei, el jefe de Gobierno Jorge Macri impulsó recortes en las iniciativas culturales en la Ciudad de Buenos Aires. Esto hirió de muerte a muchos talleres o propuestas que se dictan en el programa “Cultura en Barrios”. Producto de esta desfinanciación, decenas de profesionales ven reducida o directamente perdida su fuente laboral.

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En nuestra Comuna 12, el Centro Cultural “Discepolín” de Saavedra es un ejemplo de cómo se padece la situación: debió rearmar su grilla de actividades para este año y suspendió un proyecto que había trascendido a distintos barrios y se encontraba en pleno crecimiento.

Un programa que trascendió a los Gobiernos

El programa “Cultura en Barrios” es un ejemplo de las políticas de Estado que muchos “amantes de la república” pregonan y militan. Se trata de una idea de Pacho O Donnell cuando era secretario de Cultura de la Municipalidad de Buenos Aires en tiempos de Raúl Alfonsín, con la que buscó en tiempos de la recuperación de la democracia dar impulso a las producciones culturales locales. Y en estos 40 años, el programa se mantuvo vigente al margen de quien estuviera al frente de la administración porteña.

Al día de hoy 36 espacios culturales cubren las 15 comunas y formaban parte de “Cultura en los Barrios”. Con el aporte del estado pueden brindar talleres gratuitos o con una cuota altamente subsidiada.

El arribo de Jorge Macri a la jefatura de gobierno porteño, coincidente con el auge de la idea de ajuste fiscal libertaria, trajo como consecuencia el ajuste en cultura. El área de Hacienda del Gobierno de la Ciudad comunicó una reducción del 16% del presupuesto real del programa para este 2024.

Desde los centros culturales afirman que en el día a día, la reducción es aún mayor y atenta contra el corazón de la iniciativa. Un ejemplo concreto es el del mencionado Centro Cultural “Discepolín” (Tronador 4134), una de las tres sedes de la Comuna 12 adheridas al programa junto al Centro Cultural “Lino Spilimbergo” de Saavedra y el Centro Cultural “Belgrano R” de Villa Urquiza.

“En nuestro caso, el recorte es más grande. Algunas actividades terminan 45 minutos antes, perjudicando a quienes elegían el último turno por motivos laborales y ante este escenario no pueden tomarlas. En dos casos perdimos talleres completos y en todos los restantes, vimos reducidas horas cátedras”, cuenta Fabiana Sidero, coordinadora del espacio hace cinco años..

Adiós a “Murales por la Ciudad”

El mayor impacto en el “Discepolín” tiene que ver con la desfinanciación de uno de los proyectos más importantes de este espacio, y que se mantenía a través de “Cultura en Barrios”.

“Después de cinco años, no podremos hacer el Murales por la Ciudad. Un proyecto que nos enaltecía en toda la Ciudad y que nos abrió muchas puertas en las comunas, más allá del barrio. Donde por primera vez el Cultura en Barrios se veía reflejado en Bares Notables y paredes de nuestra hermosa Buenos Aires”, lamenta Fabiana.

Por toda esta situación, los coordinadores debieron rearmar la grilla de actividades para este 2024. Aunque mantienen cierta esperanza de que con el paso de las semanas haya una normalización.

“Esta gestión recién comenzó y por supuesto apostamos a un diálogo y principalmente, a ser escuchados. En paralelo, confiamos en que los gremios sean quienes defiendan nuestras horas cátedra. Ellos han acompañado en cada reclamo y han intervenido, esperamos se revierta por el bien de cada Centro Cultural”, suma la entrevistada.

Respecto a este caso, durante febrero y marzo la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE) había convocado a asambleas y manifestaciones para reclamar por la financiación total del Programa. Es que, para muchos docentes, la reducción de horas redunda en una pérdida de gran parte de sus ingresos. Y si bien la mayoría son de la zona, para otros implica que el gasto en traslado diario no sea siquiera cubierto por lo que perciben en la grilla recortada.

Para enfatizar la importancia de “Cultura en Barrios”, Fabiana destaca que “el programa es, fue, y será de suma importancia para todos los que quieran participar, y se generan vínculos con los asistentes de contención, apoyo y escucha, más allá de las actividades que vienen a realizar. No solamente son talleres. El alumno ingresa a un taller y luego se ve en una producción de baile, teatro, etc… Sobre las tablas de un escenario, muchas personas solas encuentran una compañía, se divierten, disfrutan, se ríen, y comparten historias de vida”, destaca.

Su necesidad es todavía mayor en épocas de crisis. La reducción de ingresos vuelve complejo buscar talleres comerciales, y crece el deseo de distraerse y desenfocarse de los problemas cotidianos. “Las vacantes se agotaron en solo 2 días”, describe Fabiana. “Son talleres gratuitos y de calidad, y quienes sostienen durante tantos años estos espacios son nuestros docentes, amantes de la cultura y comprometiéndose a ir siempre por más”.

“Proyectamos las actividades escuchando a los vecinos según sus necesidades. Contamos con un gran equipo de trabajo comprometido y desafiante ante cualquier cambio, y nuestro trabajo está enfocado al crecimiento del espacio, repensando actividades y proyectos que nos permitan desarrollar todo nuestro conocimiento y acompañamiento en el área cultural”, indica Fabiana.

Y relata que “me gusta recorrer el territorio, e intentamos junto a organizaciones e instituciones generar acciones que brinden a los vecinos un mejor vivir, disfrutando de cada actividad”.

Sobre el Centro Cultural Discepolín

Este Centro Cultural de Saavedra en 2024 cumple 36 años de existencia. Fabiana cuenta que hay dos versiones acerca de sus orígenes: “Una es que es un desprendimiento del Centro Cultural Spilimbergo, que está en Roque Pérez 3569 a 10 cuadras. Y otra, es que los vecinos principalmente de Barrio Mitre pidieron tener un Centro Cultural más cerca y se accedió a eso”.

Por su cercanía a este barrio de Saavedra, es habitual que el Centro Cultural “Discepolín” se una al “Centro Comunitario del Barrio Mitre” para hacer talleres artísticos en su territorio, al margen del programa “Cultura en los Barrios”, principalmente para niños y adolescentes.
Talleres 2024

En simultáneo con la lucha para la financiación total del Programa, el 8 de abril se iniciaron las actividades. Las inscripciones estuvieron abiertas hasta finales de marzo.

Algunas de las propuestas son: Realización audiovisual; Maquillaje artístico y Caracterización Teatral; Teatro improvisación; Producción Coreográfica; Canto Comunitario; Comics y Humor gráfico; Danza Clásica; Tango; Folklore; Salsa y Bachata, Stretching; Baile Flamenco;Pilates; Yoga,; Color y Forma; Guitarra; Pintura; Rock and Roll, Escritura y Free dance.

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