Con elecciones unificadas, los comuneros fueron convidados de piedra

Los comicios porteños del 5 de julio evidenciaron que la elección de las juntas comunales quedó subsumida y tapada por la centralidad del poder. En la categoría comuneros los votos en blanco sumaron 84.695 sufragios representando el 4,54 % contra el 1,85 % para Jefe de Gobierno y un 1,48 % para legisladores.

Por Ignacio Di Toma Mues

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La idea de descentralizar con participación vecinal no logra plasmarse ante la falta de una ley que habilite la creación de partidos comunales, tema que no fue planteado por ninguna de las fuerzas políticas que superaron las primarias abiertas.

Cabe destacar que en las 15 comunas de la ciudad se eligen siete comuneros que conforman la junta de gobierno y el más votado ocupa la presidencia.

La simultaneidad entre la elección de Jefe de Gobierno y legisladores, y la de integrantes de las juntas comunales, produce el desplazamiento de los temas vinculados con la problemática particular de cada comuna hacia la centralidad de los partidos tradicionales. La discusión macro de la ciudad tapa el debate en cada comuna.

La Ley de Comunas establecía que las elecciones de los comuneros se debían hacer en forma separada. Pero con la aprobación de leyes vinculadas al proceso electoral (primarias abiertas y utilización de boleta única y electrónica) se introdujo sutilmente una modificación que hace que todo vaya junto: jefe de gobierno, legisladores y comuneros.

“La maniobra que invisibiliza el Poder Comunal, fue posible a través de una nueva violación de la Ley de comunas, cuyo Artículo 20 establece que las elecciones comunales deben realizarse en forma separada de otras elecciones. De este modo, los candidatos a Juntas Comunales quedaron ocultos en la lista sábana encabezada por los candidatos a Jefe de Gobierno” manifestaron desde el Movimiento Comunero.

Entrevistado por nuestro medio en marzo de este año, Lito Grisafi – comunero en la Comuna 15, declaró: “el primer paso para la descentralización es la separación de la elección de los comuneros, por ahora te la meten en el combo de jefe de gobierno y legisladores, y la gente no discute comunas, discute ciudad… vamos colgados o escondidos de los grandes referentes y no por el trabajo propio y territorial”.

La Ciudad de Buenos Aires sigue esperando la descentralización real, la creación de partidos comunales, una ley de presupuesto participativo y la creación de los tribunales vecinales. Por ahora estos temas no están en la discusión parlamentaria porteña.

Asamblearios sin base comunal

Extrañamente, un partido que hace hincapié en la importancia de las comunas y la participación asamblearia en las decisiones políticas como Autodeterminación y Libertad – liderado por Luis Zamora – no presentó candidatos a juntistas en ninguna de las 15 comunas, evidenciando una falta de construcción en los barrios y un buen marketing de quien ha hecho propio el proberbio “hazte la fama y échate a dormir”. La siesta la suspende cada dos años.

Si se analizan los votos en blanco, en la categoría a Jefe de Gobierno cosechó 34.628 sufragios, para legisladores esta cifra descendió a 27.507 y para comuneros trepó a 84.695.

Esta situación está estrechamente vinculada a que muchos votantes de Luis Zamora eligieron la opción lista completa, y esta no llevaba candidatos para las juntas comunales.

Quizás estos electores no advirtieron este déficit, ignoraron el tema comunas o no consideraron relevante su existencia. Algo que el establishment político ha procurado desde la puesta en marcha de las comunas en el 2011.

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