El mapa del delito online de la ciudad, de los bombos y platillos al olvido

Mapa del delito online
El Mapa del delito online se presentó como una de las grandes concreciones de la gestión de Rodríguez Larreta el 21 de diciembre de 2017. Se anunció que se actualizaría dos veces al año. Sin embargo en 2019, año electoral, no fue actualizado. Juntos por el Cambio hizo de la seguridad su caballito de batalla, pero esconde los datos.

Por Ignacio Di Toma Mues

El 21 de diciembre de 2017, el Jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, presentó el Mapa del Delito Online de la Ciudad de Buenos Aires. “Hoy tenemos un mapa del delito que además es público y lo actualizamos cada seis meses” manifestó exultante.

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El entonces ministro de Justicia y Seguridad, Martín Ocampo, expresó que el mapa del delito “va a permitir al ciudadano controlar el desempeño de las políticas de seguridad a partir de la información que se va generando”.

En el portal digital de la Policía de la Ciudad se publicitaba que “los datos utilizados surgen de las denuncias que se realizan en las distintas comisarías de la Ciudad, los cuales son procesados y recopilados. La herramienta se actualiza dos veces al año y pueden acceder todos los vecinos”.

A dos años de su presentación quedó desactualizado. Sólo se puede acceder a datos sobre hechos delictivos hasta diciembre de 2018. De esta manera se ocultó información sobre el delito en la Ciudad de Buenos Aires durante el primer semestre de 2019. Plena campaña electoral.

Hasta la fecha de cierre de esta edición no se había publicado nada, sólo están registrados los hechos de enero de 2016 a diciembre de 2018.

El link que enlazaba con el mapa del delito desapareció de los sitios web del Ministerio de Justicia y Seguridad, y de la Policía de la Ciudad.

Tampoco se puede rastrear información sobre hechos delictivos del primer semestre de 2019 en el Banco de Datos de la Dirección General de Estadística y Censos de la Ciudad de Buenos Aires.

Sus primeras actualizaciones, presentadas en junio de 2018 y enero de 2019, fueron replicadas en los grandes, medianos y pequeños medios. Luego, en pleno año electoral, silencio de radio. Nada sobre las estadísticas delictivas de 2019.

De los datos publicados correspondientes al periodo de 2016 a 2018, se observa que la cantidad de robos* comparado con el 2015, crece un 7,5% en el 2016. Y presenta una disminución del 4,5% en 2017 respecto al 2016. Pero en el 2018 tiene un rebote, y aumenta un 4,8%.

Los hurtos** en 2016 se incrementaron un 8,9%; descendieron en 2017 un 8,7% y se mantuvieron en el mismo nivel en el 2018.

En dos años de crecimiento de la economía, como el 2015 y el 2017, la cantidad de robos disminuyeron. Mientras que en dos años de recesión, crecimiento de la pobreza y aumento del desempleo, como sucedió en 2016 y 2018, creció.

En el 2019 la crisis se profundizó. En el segundo trimestre del año pasado en la Ciudad de Buenos Aires la gente en situación de pobreza llegó al 22,1 % de la población. Mientras que un 6,2 % estaba en la indigencia. Y la desocupación trepaba al 10,9%.

El Jefe de Gobierno, cada vez que visita los barrios, en las reuniones con vecinos y vecinas, resalta que el tema que más le interesa es la seguridad. Y da cuenta de la cantidad de patrulleros, cámaras de seguridad y agentes de policía que tiene a disposición la ciudad para combatir el delito. Y lo destaca como un logro.

También, en sus discursos, marca la importancia de la transparencia en la información pública.

Entonces, ¿por qué dejar en el olvido el mapa del delito online? ¿por qué esconder los datos del año 2019?

Quizás, para no admitir que la represión del delito sin políticas de inclusión, sin un estado que fomente el ‘‘buen vivir’’, son un fracaso.


Fuente: Dirección General de Estadística y Censos y el Ministerio de Justicia y Seguridad.


*|Se entiende por robo apoderase ilegítimamente de una cosa mueble ejerciendo fuerza en las cosas o con violencia física en las personas.

**|Se entiende por hurto el apoderamiento ilegítimo de una cosa mueble, cometido sin violencia física en las personas o fuerza en las cosas.

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