El miércoles 2 de agosto, en el Salón Montevideo de la Legislatura porteña, se presentó el proyecto de ley para restituir el nombre del Barrio Presidente Perón de la Comuna 12. Participaron del acto la legisladora Berenice Iañez y los legisladores Claudio Morresi y Claudio Ferreño, junto al comunero Pablo Ortiz Maldonado, la coordinadora de la Feria de Emprendedores del Barrio Perón Ximena Merlo y el Padre Domingo Bresci.
En el Salón Montevideo de la Legislatura porteña se presentó el miércoles 2 de agosto el proyecto de ley para restituir el nombre del Barrio Presidente Juan Domingo Perón de la Comuna 12.
Participaron del acto como oradores la legisladora Berenice Iañez y los legisladores Claudio Morresi y Claudio Ferreño, junto al comunero Pablo Ortiz Maldonado (impulsor del proyecto), la coordinadora de la Feria de Emprendedores del Barrio Perón Ximena Merlo y el Padre Domingo Bresci, quien fuera párroco de la Iglesia San Juan Bautista el Precursor del año 2000 al 2015.
Entre los asistentes estaban las precandidatas a comuneras por la 12, Vanesa Coria y Erica Rivas, la actual comunera Karina Murúa, la integrante del Consejo Consultivo de la Comuna 12, Marcela Colcerniani, y la Sra. Zulema, una de las primeras vecinas del barrio Presidente Perón, junto a otros vecinos y vecinas.
Se proyecto el corto “Volvimos” de Ingrid Oxenghendler y el historiador Norberto Galasso – a través de un video – envió un emotivo mensaje de adhesión al acto en el que recordó al Padre Hernán Benítez, primer párroco del barrio.
“Hoy estamos poniendo otra piedra fundacional porque lo que vamos a intentar es restituir el nombre original del barrio Perón, sin sustituir el nombre de Cornelio Saavedra. Queremos que estén los dos nombres. Nos parece que hay una reivindicación histórica, una defensa de nuestra identidad y es algo que queremos hacer para repudiar a la dictadura de Aramburu, a todas las dictaduras y para defender a los derechos humanos” señaló el comunero Pablo Ortiz Maldonado.
Por su parte, Berenice Iañez sostuvo que “como legisladora de la Ciudad me toca acompañar muchas luchas de compañeros y compañeras que viven en villas y en barrios aún no urbanizados ni integrados de manera socio-urbana. Y la verdad que el contraste de lo que significaba el peronismo en el acceso a la vivienda digna para el pueblo trabajador es un gran rumbo. El proyecto de restitución del nombre al Barrio Presidente Perón nos trae memoria, identidad y también nos trae futuro. No debe ser sólo el mercado quien debe abocarse a la construcción de vivienda nueva ya que no garantiza su acceso, en tanto derecho fundamental, para una vida digna del pueblo trabajador”
El legislador Claudio Morresi expresó que “en democracia tenemos que reparar los crímenes aberrantes que realizaron las dictaduras. Y entre las atrocidades que hizo la dictadura de esa época está cambiar el nombre del barrio”.
“Esta es una lucha por la identidad – dijo el padre Domingo Bresci – , una de las primeras actos que hizo la Revolución Fusiladora fue el decreto 4161 y con eso se intentó borrar todo: nombres, cosas. Y esa lucha por la identidad forma parte de la lucha por la memoria, la verdad y la justicia.”
Barrio Presidente Perón
En noviembre de 1949, en los suburbios de la entonces Capital Federal, nació un barrio con características únicas. El gobierno peronista se propuso crear en un perímetro delimitado por la Avenida General Paz, la hoy Av. De los Constituyentes y Crisólogo Larralde, un área residencial compuesta por chalets californianos, basados en el modelo arquitectónico conocido como “ciudades-jardín”.
Se construyeron en total 428 casas, con 24 modelos distintos. Sus residentes fueron mujeres con hijos, o familias que eran escogidas por intermediación de los sindicatos o la Fundación Eva Perón, que diseñó y financió el proyecto. Las casas se entregaron mediante créditos del Banco Hipotecario. Era la primera vez en la que la clase obrera habitaba viviendas de este tipo, tradicionalmente reservadas a las clases más acomodadas.
Ubicado en los suburbios de Buenos Aires, con una avenida General Paz recientemente creada y lejos del transporte que permitía viajar al centro, la idea fue permitir que todos los vecinos tuvieran los servicios más necesarios dentro del propio barrio.
Así, el “Barrio Perón” contaba dentro de su superficie con una escuela pública (la número 19, “Naciones Unidas”), un centro comercial, una estación de servicio, un garage, una sucursal del correo, una farmacia y hasta un cine-teatro. Organizado en forma radial, en el medio se encontraba el parque principal y la iglesia “San Juan el Precursor”, construida en forma contemporánea y con la idea de “abrazarlo”.
En 1955, luego del bombardeo a la Plaza de Mayo y el golpe de estado de la denominada Revolución Fusiladora, se modificó el nombre del barrio, que pasó a llamarse Cornelio Saavedra, y comenzó a cambiar su fisonomía. Además, al no poder pagar los créditos de las viviendas, algunos de los habitantes originales fueron siendo expulsados.
Hoy el barrio conserva parte de esas características arquitectónicas que lo hacen único en la Ciudad de Buenos Aires, sumado a su buen acceso desde General Paz. Además, es uno de los pulmones verdes de la Ciudad, un modelo de viviendas inclusivas y un símbolo vivo de políticas públicas que promueven la igualdad.