En medio de un fuerte operativo policial, la Legislatura sancionó un régimen laboral para la Enfermería de la Ciudad de Buenos Aires, el que estuvo impulsado por el Gobierno porteño y que obtuvo un acotado margen de votos mayor por encima de la propuesta de la oposición que proponía la incorporación de los licenciados en la ley 6035, que regula a los trabajadores de la salud pública en el distrito.
Por Valeria Azerrat
La iniciativa del oficialismo porteño se convirtió en ley durante la sesión del último jueves de noviembre con 27 votos positivos de los bloques de Vamos por Más (que reúne a las bancadas del PRO y la Coalición Cívica), junto a La Libertad Avanza. En contra, lo hicieron 26 diputados de Confianza Pública, Unión por la Patria y el Frente de Izquierda. A ellos, se les sumaron dos escaños de la UCR, pero los restantes siete del espacio radical optaron por la abstención.
El resultado de la votación generó enojo y decepción entre el grupo de trabajadores de la Enfermería que seguía la sesión dentro del recinto y en las puertas de la Legislatura. Allí, sobre la peatonal Perú al 100, se registraron incidentes como consecuencia del operativo de la Policía de la Ciudad que reprimió a los manifestantes con gases y palos. También, recibieron golpes legisladores de la oposición y hubo dos personas demoradas.
El nuevo régimen “de Empleo y Desarrollo Profesional de la Enfermería del Sector Público en el ámbito del Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires” abarca “los cuidados autónomos y en colaboración que se prestan a las personas, familias y comunidad a lo largo de todo su ciclo vital y atendiendo al proceso salud-enfermedad desde una perspectiva integral que propicie la promoción de la salud y la prevención de enfermedades”.
Sus funciones “esenciales” son “el cuidado del paciente, el fomento de un entorno seguro, la investigación, la participación en las políticas de salud, así como en la gestión de los procesos asistenciales tanto del paciente individual como en los sistemas de salud, y en la capacitación”.
Entre muchos aspectos, la normativa regula las condiciones de ingreso a la carrera, los derechos y obligaciones del personal comprendido en el sector público, el régimen de licencias, los principios para la participación de los concursos, la jornada laboral de 35 horas semanales, la promoción de grados. También la capacitación y el salario, sobre el cual dispone un mínimo inicial equivalente al resto de los trabajadores de la salud.
La situación de la Enfermería en la Ciudad de Buenos Aires
En la Ciudad de Buenos Aires, funcionan 14 hospitales generales que integran el sistema de salud pública y gratuita junto con dos hospitales de niños y veinte especializados. También, existen -en el esquema sanitario distribuidos en territorio porteño- unos 45 centros de salud de atención primaria, una veintena de centros médicos barriales y dos centros de salud mental.
Más de 11000 enfermeras y enfermeros se desempeñan dentro del sistema de salud, de los cuales hay unos 6000 que son graduados en la tecnicatura, en tanto que los restantes 5000 son licenciados. Para obtener este título, se requieren al menos cinco años de estudio y capacitación.
En 2018, la Legislatura, también a instancias de un proyecto enviado por el Poder Ejecutivo, aprobó una ley -la 6035- para fijar el vínculo laboral de los profesionales de la salud en la Ciudad. Incluyó 21 disciplinas y licenciatura, entre ellas, la medicina, obstetricia, bioquímica, farmacéutica, kinesiología, psicología y fonoaudiología. Pero, aquella normativa dejó afuera a los trabajadores de Enfermería, tanto a los licenciados como a los técnicos.
Desde hace seis años, este sector inició una campaña para lograr su incorporación a la 6035 ya que quedaron regulados por la ley 471 de las relaciones laborales del personal de la administración pública. El reclamo fue por distintas vías: la legislativa con el proyecto que finalmente quedó desestimado y la judicial que llegó al Tribunal Superior de Justicia local.
“El proyecto aprobado no equipara los derechos y deberes de los enfermeros con los restantes profesionales de la salud”, dijo Humberto, trabajador del Hospital Tornú y de la Asociación de Licenciados en Enfermería (ALE), uno de los gremios que lideró las distintas acciones junto con el Sindicato de Trabajadores de la Enfermería (SITRE) y la Asociación de Trabajadores del Estado.
El enfermero contó que los trabajadores estaban “ilusionados” por el debate que venía dándose en la Legislatura y en el cual “había un compromiso de la mayoría de los diputados por aprobar la inclusión en la ley 6035”. “A última hora, algunos de los legisladores se dieron vuelta y perdimos por un voto. Fue un resultado muy reñido”.
“Sentimos un dolor muy grande, nos molesta mucho porque somos profesionales de la salud, tenemos horas de estudio y de práctica. Y este proyecto del régimen específico no fue consensuado con la Enfermería. Es cierto que tiene alguna mejora, pero lo rechazamos”, remarcó uno de los referentes de ALE en el hospital del barrio de Parque Chas.
Desde SITRE, en tanto, aseguraron estar “golpeados de todas las maneras posibles”. “En el recinto de la Legislatura nos golpearon anímica y económicamente. Una vez más nos sacaron la posibilidad de ser incluidos donde nos corresponde, que es en la carrera profesional de salud”.
La referencia hecha por el sindicato alude a lo ocurrido el jueves 28 de noviembre en las cercanías del edificio de la Legislatura tras la aprobación de la ley. Allí, los trabajadores -que permanecían detrás de un vallado dispuesto por la Policía desde muy temprano- tiraron abajo la estructura y llegaron hasta el ingreso del Parlamento sobre Perú al 100.
Estuvieron acompañados por un grupo de diputados que salió a calmar la situación, algo que no pudieron lograr ya que los efectivos policiales recibieron la orden de despejar la calle peatonal. Así fue como avanzaron sobre los manifestantes, con ayuda de la tonfa, los escudos y el uso de gases.
Durante la embestida, detuvieron a dos trabajadores. Los mantuvieron esposados por más de dos horas hasta que fueron liberados. Ambos -una mujer y un hombre- fueron trasladados al hospital para recibir atención médica.
Al cierre de la jornada, el bloque Unión por la Patria emitió un comunicado para repudiar “la represión que llevó adelante la policía de Jorge Macri en la puerta de la Legislatura, que golpeó e hirió a enfermeras y legisladores” y se comprometió “a seguir trabajando en el reconocimiento de los licenciados de la Enfermería como profesionales de la salud”.
“Esta pelea va a seguir en cada hospital y centro de salud. Nuestro compromiso va a seguir siendo siempre con la primera línea”, afirmó la diputada Cele Fierro, del FIT Unidad-MST. Por su parte, Claudio Romero, del PRO, afirmó que el proyecto “defiende la jerarquización de la enfermería en su conjunto”, por lo que consideró que “con este marco jurídico único, lo que hacemos es que haya un formato de carrera única”.