Este grupo de teatro comunitario de Saavedra contará con vecinos y vecinas actores y las obras serán sobre la historia e identidad local. Lo coordinará la vecina y teatrista Laura Brauer.
Por Juan Manuel Castro
Saavedra a escena. Un grupo de vecinos y dramaturgos gestó el primer grupo de teatro comunitario del barrio. Con ensayos en espacios públicos y bajo techo, desarrollarán y llevarán al escenario obras que traten sobre la historia, el presente y la mística de este territorio: de Roberto Goyeneche a ser el único barrio porteño con acta fundacional, hace ya 150 años; y de las murgas a la pasión por Platense.
“El teatro comunitario es una práctica transformadora”, señala la vecina y teatrista Laura Brauer, creadora de este proyecto. “Saavedra es un barrio muy rico, con población activa, muy amplia, heterogénea, estamos muy interesados. La primera obra va a ser para contar el barrio, estamos estudiando el barrio. La idea es juntarnos con vecinos para recolectar historias en nombre propio”, adelanta.
En esta fase inicial ya hay involucrados una docena de artistas ligados a distintas disciplinas teatrales (dirección, escenografía, puesta en escena) que residen en la zona. En breve se abrirá la convocatoria para que se sumen todos aquellos vecinos que quieran participar.
“No hay una edad mínima ni máxima. Cualquier persona que tenga interés puede venir, sea que haya hecho mucho teatro o música, o esté en cero absoluto. El funcionamiento del grupo incluye el aprendizaje de teatro y música para poder armar una obra teatral frente a un público”.
“El nosotros, lo épico”
“Un proyecto teatral de la comunidad para la comunidad”. Así lo definen en la Red Nacional de Teatro Comunitario, que agrupa elencos de todo el país, muchos de ellos originados en la Ciudad de Buenos Aires, identificados con la mística y tradición de cada barrio, tal como se propone el flamante grupo de Saavedra.
“Nace de la voluntad comunitaria de reunirse, organizarse y comunicarse, parte de la idea de que el arte es una práctica que genera transformación social y tiene como fundamento de su hacer, la convicción de que toda persona es esencialmente creativa y que sólo hay que crear el marco y dar la oportunidad para que esta faceta se desarrolle”, añaden en la Red.
“Es abierto a toda persona que se acerque y quiera participar, de manera voluntaria y en carácter amateur, es decir, con amor por lo que se hace. En él todos tienen un lugar, así tengan 4 o 90 años. Las experiencias de distintas edades se valoran en este intercambio”, mencionan y también sostienen: “Todo el que participa asume un compromiso con lo artístico (se compromete a ensayar, practicar, hacer funciones, etc.) y con las tareas organizativas que tengan que ver con las necesidades del grupo y su funcionamiento”.
“El teatro comunitario es numeroso. No debería contar con menos de 20 integrantes. Por lo tanto, en la temática de sus obras siempre aparece el nosotros, lo épico. Su búsqueda estética aborda tanto la comedia como la tragedia, pero nunca el drama psicológico. Retoma y resignifica, además, los géneros populares tales como el sainete, la murga, el circo, la zarzuela, la opereta y otros”, precisan.
De Bertolt Brecht a Saavedra
El espíritu de lo profesado por los elencos de teatro comunitario está presente en los estudios de Laura Brauer. Dramaturga, actriz, directora y profesora de actuación argentina. Realizó diversos trabajos teatrales en Brasil, Alemania, Portugal, Inglaterra y Argentina en centros penitenciarios, escuelas, teatros e institutos de zonas periféricas y centrales.
Se especializó en poéticas políticas, estudiando técnicas del “Teatro del Oprimido” con el director brasilero Augusto Boal y la metodología del dramaturgo alemán Bertolt Brecht, tras haber viajado a Alemania. En este contexto, empezó a vincularse con elencos locales de teatro comunitario.
“Todo en la línea teatral de interés político y social de incidir en la sociedad con el teatro”, explica la teatrista. Resalta “el carácter épico en el sentido de ubicarnos como sujetos sociales en la historia para poder pensar el futuro a partir de un pensamiento crítico sobre el pasado”.
Entre otras distinciones, obtuvo becas de la Secretaría de Cultura de la Nación Argentina, la Academia de Arte de Berlín, el Instituto Goethe y el International Theater Institut (ITI) para participar de estudios y trabajos vinculados a estas poéticas en Berlín.
Vivió casi una década en Brasil, continuando con su labor artística. El año pasado regresó al país y se mudó a pocas cuadras del Parque Saavedra. En esta vuelta es que empezó a gestarse el proyecto de teatro comunitario para el barrio.
El apoyo de grupos con historia
Gracias a su estudio sobre la obra de Bertolt Brecht, Brauer hace tiempo está en contacto con grupos de teatro comunitario de la Ciudad de Buenos Aires: “Hacen teatro épico, un teatro en asuntos de interés público y con incidencia social”.
En ese contexto de intercambio, surgió un proyecto junto Adhemar Bianchi, director del Grupo de Teatro Catalinas Sur (La Boca), y Ricardo Talento, a cargo del Circuito Cultural Barracas.
“Con mi mudanza, ellos me proponen que abran un grupo en Saavedra. La idea inicial era hacer un trabajo conjunto con ellos. A partir de esa propuesta, tomé un curso para organizar grupos, fue con Edith Scher del grupo de teatro comunitario de Villa Crespo llamado Matemurga. De ahí convoqué gente de la zona que ya se desempeña en el ámbito profesional del teatro”.
Este fue el paso previo a abrir la convocatoria general para vecinos actores con y sin experiencia. “Es enorme el potencial estético de juntar personas amateurs coordinadas por profesionales en el armado de piezas teatrales masivas para contar la historia del territorio”, resalta.
“Nos interesa contar la historia del barrio como primera propuesta para conocernos, habitar y entendernos en el mapa social además del geográfico”, detalla sobre los planes a mediano plazo.
De este modo, luego de lanzar la convocatoria, iniciarán los ensayos, los cuales se realizarán en un primer momento en alguna de las plazas y parques de Saavedra. También incorporarán un lugar bajo techo para días de frío o lluvia.
Es algo habitual en grupos de teatro comunitario. Por ejemplo, el grupo Sin Telón de la zona de Abasto y Almagro realiza sus ensayos y brinda funciones en la Plaza Almagro, a pocas cuadras del Teatro Archibrazo, espacio donde nació este elenco.
Sobre las obras que desarrollará el grupo de Saavedra, la teatrista señala que “el caldo de cultivo es grupal” y “la síntesis poética se hará desde la dirección actoral y musical”. Bajo la premisa de que el “aporte es colectivo”, surgirán las piezas artísticas que luego se llevarán a escena.
La creación de este grupo de teatro comunitario llega en un momento especial para Saavedra: el 27 de abril se conmemorarán los 150 años de su fundación. Se evocará además la primera década de las trágicas inundaciones del 2 de abril de 2013, cuando murieron unos seis vecinos, con cientos de damnificados. Y así con otras tantas efemérides que marcan el sentir vecinal.
Desde el arte escénico hecho por vecinos se podrá “pensar el futuro a partir de un pensamiento crítico sobre el pasado”, tal como afirma la vecina y teatrista Laura Brauer.
Para participar enviar correo electrónico a teatrocomunitariosaavedra@gmail.com.