El arte de no limitarse

El viernes 12 de diciembre se desarrolló SinLimitarte en el Centro Cultural El Alambique, en Villa Pueyrredón. Previo a la realización de este encuentro entrevistamos a Magali Cusatis, alma mater de esta movida que busca entrelazar el arte a través de distintas expresiones culturales.

Por Natalia Saavedra

sinlimitarte

El Arte no conoce de límites. La música, la pintura, la fotografía, el teatro, se entrelazan y se combinan para encontrar una manera de comunicar. Esa es la intención y la búsqueda de SinLimitarte, un evento que de la mano de Magali Cusatis, recrea el arte y promueve el encuentro de artistas y público, sin ningún tipo de límites.

Mate en mano, Magalí rememora los inicios del proyecto: “empecé hace cuatro años, estuve de viaje un tiempo y cuando volví vine con las ganas de juntar artistas, entrelazarlos, generar un vínculo entre ellos. Yo soy actriz y tenía como ganas de vincularme con músicos, artistas plásticos, primero arranque con los artistas conocidos y les empecé a comentar la movida, se empezaron a enganchar y los dos primeros años los hice en bares por Palermo. Hace dos años empezamos a hacerlo en centros culturales o clubes de barrio, fuimos itinerando un poco, hasta que este año encontramos a El Alambique, y este va a ser el tercer evento que se desarrolla allí”.

Sinlimitarte, prosigue su creadora, “es un compendio de artes, siempre hubo música, teatro y exposiciones, tanto de cuadros o de ilustraciones o de fotos y en distintos formatos. La idea es jugar con lo que es el montaje de las obras. Yo siempre les digo a los artistas que no se limiten a colgar un cuadro o una foto en un clavito… Cada uno expone, que no se limiten absolutamente a nada, lo que quiera el artista. Si ha pasado que se junten dos artistas y hagan algo en común”.

“Después empezamos con el arte en vivo, una chica que expuso una vez unos grabados, ella es también como una integrante más del equipo porque estuvo en casi todos, un día comentó que le gustaba mucho pintar en vivo y así empezamos; es el día de hoy que sigue pintando en vivo y trae artistas invitados. Por lo general participa el público, la idea es que haya un vínculo entre artistas y público, eso me interesa un montón”, concluye.

El 12 de diciembre, varios artistas participarán del encuentro, como Sonomantis, un grupo de música que mezcla diversos géneros y que según Magalí “le aporta mucha energía”.

“Han pasado muchas bandas por Sinlimitarte, pero la onda que tiene Sonomantis me gusta”, agrega. Luis, guitarrista y corista de la banda, la define como “bastante eclécticos, no tocamos un solo estilo sino que tenemos una tendencia y un sonido, tocamos bastante ska, funky, soul, caribeño pero bien rockero también”.

Con un EP de 4 temas, los integrantes de la banda son de Venezuela, como el caso de Liz, en la voz y Cristóbal en la trompeta, de Colombia Juan a cargo de la percusión y dos argentinos en batería y bajo, Mata y Daniel. Luis es de Venezuela.

Con temas propios, algún que otro cover y un recorrido por el circuito porteño, Sonomantis cerrará su año en El Alambique junto con los demás artistas como el dúo Parmil y Los cualquiera, que hacen música y humor.

Y como el evento justamente no se limita solo a una rama del arte como es la música, habrá exposición de cuadros, de fotos, y hay una chica que va a montar diseño de indumentaria por primera vez.

“También hay muchos artistas nuevos y este es el lugar para que arranquen. Está pasando mucho con la gente del barrio y eso es lo que a mí me interesa. Porque en general todo este tipo de movidas pasan por Palermo o en el centro u otro tipo de barrios y El Alambique nos abrió la puerta enseguida, yo lo conocí por medio de una amiga, le escribí a Marcela y le mande un videíto que habíamos hecho con otras fechas. Cuando hicimos el último en julio, me dijo que era el espíritu que querían para el lugar. Ellas se coparon con la propuesta y nosotras también con el lugar”, remarca Cusatis, quien ya se proyecta para el año próximo con nuevas ideas y puntualizando más en la “calidad y no a la cantidad”.

“Queremos ocuparnos más del sonido, de los detalles, de la atención y de todo eso porque si hacemos muchos seguidos, no tenemos el tiempo para dedicarnos bien. Prefiero hacer algo con más calidad que salga todo bien, que todos se sientan bien, que la gente la pase bien y que espere al próximo”, concluye.

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