El Club Social y Sportivo Devoto resurge
con nuevas actividades deportivas y sociales

Entrevista al Presidente del Club Social y Sportivo Devoto, Carlos González. Una institución que resurge con actividades deportivas y sociales.

(EBVP) Carlos González tiene 67 años y desde el 2013 es el presidente del Club Social y Sportivo Devoto. Despuntó el “berretín” del futbol cuando chico en la institución y la alegría de los grandes bailes. Lo acompañan en la comisión directiva: Horacio Podesta como vicepresidente; Jorge Virardi, en la secretaría y Juan José Guillán en la tesorería.

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En los años 2011 y 2012 estuvo a punto de desaparecer, comenta Carlos González, y rememora que en 1971 se vendió una parte de la sede “con veladas intenciones de proyectar un continuo debilitamiento del club”.

“El fondo del club da a Atomplast y el que compra es el dueño de esa empresa. No se llegó a subdividir y esa parte quedó con un convenio de consorcio, donde actualmente funciona un salón de fiestas”.

“Uno de los más grandes inconvenientes – explica Carlos – es que los edificios que se hicieron sobre Gabriela Mistral al lado del club empezaron a tener incomodidades por nosotros. Sin embargo cuando vinieron acá, este era un club con cancha de futbol (está en la planta alta y es descubierta), ya existíamos, evidentemente habrán comprado la propiedad un poquito más barata porque estaban al lado de un club con su canchita de fútbol” advierte.

Comenta con fastidio que “el club estaba debilitado, sin comisión que lo representara, porque se habían robado todos los libros, lo habían dejado indefenso en todos los ordenes y sólo faltaba cargarlo de denuncias para llevarlo a una situación de quebranto y remate de la propiedad e iba a terminar siendo un negocio inmobiliario”.

Y completa el cuadro de situación: “nosotros no teníamos como demostrar nuestras autoridad al no tener los libros, hasta que logramos que la Inspección General de Justicia nos reconociera y nos otorgara los libros y a partir de ahí nos pusimos a trabajar”.

Pero los problemas no cedieron: “hoy seguimos con denuncias en nuestra contra, el sábado (19 de noviembre) fue por ruidos molestos a las 11 y media de la mañana con chicos de 8 años jugando al fútbol, pero con una diferencia, hoy el club brinda un marco social que durante mucho tiempo no tuvo”.

“Falta entendimiento de cómo funcionan los clubes sociales – comenta Carlos – se los toma como sociedades anónimas, los clubes están inscriptos en ganancias cuando son sociedades sin fines de lucro, se los obligan a cumplir con exigencias terribles cuando no debería ser así”.

Por otro lado remarca que: “aquel que tenga intención de lograr algún cargo a nivel político siempre va a poner el estandarte del club social, el del barrio, pero llegado el momento no hay ninguna acción”.

“En noviembre de 2015 teníamos asignado un subsidio de Nación con orden de pago para hacer el techado de la cancha de fútbol, y el cambio de gobierno hizo que no se nos pague. Y era uno de los únicos apoyos que conseguimos, y que era el más importante, hoy llueve y los chicos se tienen que quedar en su casa, no vienen a jugar”.

Actividades en el Devoto

Actualmente concurren alrededor de 200 personas al gimnasio y cerca de 150 chicos van a la escuela de fútbol. “Cuando empezamos – acota Carlos – teníamos chicos de 5 a 12 años, y después nos dimos cuenta que de los 12 años en adelante o son crack y están en club de fútbol o están en la calle, y extendimos las edades y la llevamos hasta los 20 años”

“Acá viene gente que participa de los juegos de salón – en el buffet – como en cualquier club, como era antes, sólo que ahora hasta sacaron, no solo los clubes, sino los bodegones. Y creo que hubo muchos intereses para que la sociedad no tenga estos rincones donde pueda encontrar puntos de coincidencia”.

“La activad de la ejercitación física con aparatos son actividades nuevas que le interesan a la sociedad y que le dan el ámbito a aquellas personas que no vivieron las épocas nuestras, acá hay actividad hasta las once de la noche, le da tiempo a una personal que salga de su trabajo y venga al club, que cuando nosotros veníamos no existía, la prioridad era el fútbol, los bailes, hoy hay un mix, está el salón, el gimnasio y la canchita”

Otra de las actividades que Carlos destaca es el Muay Thai, que es un boxeo tailandés. “Antes no se practicaba y hoy tenemos mucha gente que viene. El boxeo recreativo no existía, antes era competitivo, no somos el semillero de grandes figuras deportivos, somos entidades que cobijamos a los que juegan pero que no tiene grandes condiciones para ser profesional, pero que le gusta este deporte. Y me sorprende que el boxeo recreativo lo practican chicas de 12, 13 años, y gente de 60 o 70 años”.

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