En el Salón Jauretche de la Legislatura de la Ciudad de Buenos Aires se realizó el miércoles 20 de agosto la presentación del proyecto de Ley de Reintegro de Tarifas de Servicios Públicos para los clubes de barrio.
Se presentó el pasado 20 de agosto, en el Salón Jauretche de la Legislatura porteña, un proyecto – de autoría del Legislador Alejandro Grillo de Unión por la Patria, destinado a otorgar a los clubes de barrio un aporte económico no reintegrable equivalente al 40% de las facturas de energía eléctrica y gas.
Durante la jornada hicieron uso de la palabra Maia Daer, presidenta de la Comisión de Deportes y Turismo de la Legislatura porteña; Anita Rodríguez y Juan Ignacio Bruera, consejeros titulares por los clubes de barrio en el Consejo Asesor del Deporte; Santiago Yanotti, gerente general del Ente Provincial Regulador de la Electricidad de Río Negro, ex vicepresidente de CAMMESA y ex subsecretario de Energía Eléctrica de la Nación; y finalmente el legislador autor del proyecto.
Estuvieron presentes legisladores, comuneros; autoridades de todas las federaciones de clubes de CABA, y consejeros por los clubes de barrio en el Consejo Asesor del Deporte.
El objeto del proyecto es otorgar una contribución de aporte económico no reintegrable “equivalente al 40% de las facturas de energía eléctrica y de suministro de gas que hayan sido abonadas por los Clubes de Barrio que se encuentren inscriptos y con la documentación al día en el Registro Único de Instituciones Deportivas”. Y estará vigente por dos años desde la reglamentación de la ley.
El proyecto establece que “el reintegro se realiza sobre el monto de la factura neta” y que las entidades deberán enviar a la Secretaría de Deportes de la Ciudad de Buenos Aires la documentación escaneada de sus pagos, con juramento de que se trata de copia fiel del original. Los reintegros se efectuarán en un plazo de 30 días corridos desde la presentación de la documentación.
En los fundamentos de la iniciativa, Grillo subraya la importancia de los clubes: “Los Clubes de barrio son pilares fundamentales de contención para el bienestar en la vida de las personas, además de fomentar la práctica deportiva, representan espacios de pertenencia, solidaridad, compañerismo y participación activa”.
Agrega que estos espacios van más allá de lo deportivo: “Un club no nace de un día para el otro. Un predio, una construcción, un edificio y sus canchas e instalaciones deportivas y sociales, son el resultado de muchos años de trabajo, pero sobre todo de un proceso que generalmente nace en un potrero, dos palos que simulan un arco, un sueño o de la necesidad de una comunidad que se organiza”.
El proyecto también detalla que los clubes beneficiados pueden ser desde grandes complejos con múltiples instalaciones hasta un potrero modesto, pero todos comparten el rol de ser lugares de encuentro y socialización. Grillo destaca que “cuando un club cierra, parte de la comunidad muere con él”, y sostiene que el Estado debe contribuir a su sostenimiento, especialmente ante el aumento de tarifas y los impactos económicos recientes.
La autoridad de aplicación de la ley será la Secretaría de Deportes, encargada de verificar el cumplimiento de los requisitos y realizar las transferencias directas a las entidades. Con esta medida, el legislador busca brindar un alivio económico concreto y reforzar el rol social y formativo de los clubes en los barrios porteños.
