Un grupo de estudiantes universitarios creó una publicación en papel, autogestionada y de aparición periódica. Allí se pueden encontrar textos, análisis, fotos y dibujos. A fines de abril celebraron un festival en El Laberinto de Chas que incluyó una feria de creadores y música en vivo.
Por Juan Manuel Castro
“Juntarnos, conocernos, construir y organizar estos espacios de resistencia, memoria y disfrute”. Así definieron los y las integrantes de la revista juvenil de arte y política Tinta a la edición de su primer festival interdisciplinario que incluyó una feria de expositores y música en vivo, el cual se desarrolló el último sábado de abril en El Laberinto de Chas (Benjamín Victorica 2642).
En la sala principal del Laberinto se colocaron varias hileras de mesas con distintos puestos de emprendimientos a cargo de jóvenes autores. Además de conseguir las ediciones anteriores de Tinta, había prendas estampadas, libros y revistas de poesía, postales y stikers. Una armonía de colores y texturas que se complementaba con la jornada de música y micrófono abierto que se desarrolló junto a la feria.
En tiempos de redes sociales, virtualidad e incluso anonimato digital, los jóvenes que llevan adelante Tinta bregan por una cultura del encuentro, del cara a cara, de debatir con el otro. “La idea es que sea un espacio de charla y que permita compartir cosas que nos interesan, que escribimos, que pensamos (por lo tanto, vale todo)”, señalaron en septiembre de 2023 para la convocatoria del primer número impreso de Tinta, el cual entró a imprenta en diciembre de ese año.
Además está abierta la convocatoria oficial para la quinta edición de la revista: “Recibimos todo tipo de materiales: poesía, reflexiones, cuentos, historietas, dibujos, fotos, ensayos, propuestas”. Aquellos “pibxs de entre 18 y veinticortos” que estén interesados, pueden escribir a revista.tinta.arte@gmail.com. (Instagram: Revista Tinta)
Cada vez que una edición de Tinta en papel llega a la calle, se festeja con una presentación en vivo. La Biblioteca Popular El Resplandor del Club SABER (Llerena 2727, Parque Chas) ha sido el punto de encuentro para estos eventos. Junto al Laberinto de Chas son espacios barriales de extensa trayectoria que acompañan las expresiones de estas nuevas generaciones.
Violeta, integrante e impulsora de esta revista “de (di) fusión de arte & política”, repasa sobre la historia de Tinta: “Somos un grupo de jóvenes, nos conocemos desde distintos ambientes, somos de distintas facultades, varios nos conocíamos del secundario. El colectivo surge con la idea de juntarnos, conocernos, armar espacios de resistencia, de debate y de pensamiento artístico”.
“Nos interesa empezar a conversar, faltan espacios de debate, de charla y conversación, algo más genuino, más real, del frente a frente. Se trata de establecer una conversación y ver cómo posicionarnos ante las cosas que pasan. En principio, nos parecía en este momento defender la cultura, el arte colectivo”, agrega Violeta.
Sobre las presentaciones de cada número, Violeta lo describe como parte importante del proyecto: “Cada uno llega, lee y ahí conversamos. Tener estos eventos es también una forma de convocar para los próximos números”.
Si bien Violeta reconoce que “es complicado editar en papel por el costo”, señala que los integrantes de Tinta lo priorizan: “Es parte de vernos en persona, en este momento no es lo mismo que solo lo digital. Tenemos un blog y redes, que son importantes, porque muchos de los colaboradores son de distintas provincias del país. Pero nuestro interés es llevarlo a algo personal”.
Con los meses y el “boca en boca”, Tinta creció en cantidad de integrantes y colaboradores. También amplió sus propuestas, por eso el primer sábado de marzo de este año celebraron la primera edición de un ciclo llamado Tinta Cine. Allí proyectaron Nueve Reinas (2000) en la Biblioteca Popular El Resplandor.
Al poco tiempo, en Tinta se organizaron y gestaron su primer festival, celebrado el 27 de abril de este año en El Laberinto de Chas, uno de los espacios sociales, culturales y políticos más reconocidos en la comunidad de Parque Chas y la Comuna 15.
“El evento surge de querer armar un espacio, de juntar gente que no conocíamos. Pensamos en armar un espacio en que cada uno comparta y bancar así a los artistas y feriantes”, señala Violeta.
Bajo el lema “En defensa de la cultura y el arte”, el festival contó con una feria de fanzines, revistas, calcos, prendas estampadas y demás emprendimientos artísticos a cargo de una joven camada sub 30. El encuentro incluyó música en vivo y un espacio de micrófono abierto para leer poesía.
“Estamos muy contentos”, cuenta Violeta al ver el festival en marcha. “Vale la pena, estamos contentos, apostando a este proyecto colectivo que venimos armando entre tantos”.
Entre los feriantes también había buen humor por cómo se desarrolló este festival. Por ejemplo, la estudiante de artes e ilustradora Milena Leczycki, creadora del proyecto Milesbozos, asegura: “Vengo activando desde el año pasado, me copé con el hecho de exponer mis trabajos y vengo creciendo con cada feria. Este festival de Tinta lo conocí porque me llegó la revista por Instagram. Una amiga poeta había participado en el último número y así conocí su existencia”.
En cuanto a su proyecto Milesbozos, menciona que le gusta el género fantástico, por lo cual suele dibujar y crear monstruos y criaturas de distinto tipo, que luego vuelca en calcos o postales. También cuenta con otra corriente dentro de su producción, en la que experimenta con obras sobre “el círculo íntimo, la nostalgia, lo personal”.
A pocos metros sobre la misma mesa, estaban los fanzines de Diana Agostina CriCri, artista no binarie, con su proyecto editorial MiniCine, bajo el lema “Nada es obvio”. “Trato de construir desde la perspectiva romper con la obviedad, con lo esperado”. Sus textos tratan sobre la diversidad sexual, vivencias y poesía.
Diana cuenta que lee al menos una o dos veces por semana en eventos culturales como este festival de Tinta. Allí lleva sus fanzines de MiniCine y también es parte organizadora del proyecto editorial llamado Desviadesydiverses, definido por sus impulsores como un “espacio de apañe y arte creado para personas neurodiversas o que resisten a la hetero-cisnorma y el capacitismo”.
Al cierre de esta edición habían publicado varios fanzines con decenas de autores convocados bajo temáticas comunes. En la última convocatoria se invitaba a escribir sobre animales. Hay tiempo hasta el 28 de junio. (Instagram desviadesydiverses)