Colectivo Barrial Parque Chas |
Con la motivación de defender la política como herramienta de transformación se reúnen, desde hace un año y medio, todos los sábados en asambleas abiertas. Son un grupo de alrededor de 60 vecinos de Parque Chas que no conforman ni pretenden conformar un partido político. Tampoco todos sus integrantes tienen un referente partidario. Si bien es un espacio en formación, aclaran que la clave está en la unión del grupo, la integración constante de nuevas voces y la mirada puesta en construir. La idea ya se replicó en barrio Rawson y esperan que se multiplique en otras zonas.
Por Luciana Aghazarian
En octubre de 2015, en el marco de las elecciones presidenciales que llevaron a un posterior proceso de ballotage entre Mauricio Macri y Daniel Scioli, en Parque Chas “los vecinos se empezaron a mover”. “Se corrió la voz rápido en el barrio de que la gente se estaba juntando. Yo soy militante peronista y me acerqué al igual que otros vecinos pertenecientes a distintas fuerzas políticas o ajenos a la militancia política que no querían que gane en Argentina el neoliberalismo”, comienza Emilia Bonifetti, actriz, directora de teatro y mamá de una nena de tres años.
“No es una agrupación política particular, es un colectivo político”, aclara. ¿Pero qué quiere decir eso? El Colectivo Barrial Parque Chas es un grupo que se reúne todos los sábados en asambleas que se componen de distintas comisiones para discutir, debatir, tratar acciones específicas que están por fuera de la coyuntura política partidaria.
Es decir, en tiempos de elecciones no apoyan a un candidato en particular, ni hacen campaña, sí política. Y no les da miedo ni vergüenza esa palabra.
“Queremos mostrar otra forma de hacer política: potenciar el sentido de comunidad, de defender el Estado, el espacio público. Queremos reconstruir este tejido social tan roto: hablar con el vecino, construir opiniones distintas, escuchar. Siempre teniendo en cuenta el contexto y defendiendo la política como herramienta de transformación. No tenemos candidatos ni referentes, es un colectivo horizontal, que trata de no ir con la coyuntura política, vamos con acciones por fuera de eso”, explica Emilia.
Entre las actividades regulares del Colectivo Barrial Parque Chas se encuentran las postas de reciclado, todos los sábados de 10 a 12 en la esquina de Los Incas y Victoria y de Gándara y Victorica (el material reciclable se dona a la cooperativa El Álamo), así como todos los lunes y jueves a las 19 realizan caminatas saludables por Parque Agronomía.
También están juntando firmas para recuperar el nombre original de la calle ahora llamada Victorica que es “La Internacional”, acompañaron la lucha de la escuela secundaria Federico García Lorca para que no le quiten espacio del patio para construir un jardín, organizaron una caminata por la igualdad de género, se involucraron en las reuniones de la comuna para la puesta en valor de la plaza Dominguito logrando imponer algunos de los requerimientos vecinales, organizaron plantación de árboles nativos y cine debate al aire libre, entre otras tantas acciones.
La heterogeneidad de las actividades se debe a que el grupo que reúne a alrededor de 60 vecinos en forma activa, se divide en cinco comisiones a través de las cuales trabaja intensamente según la temática: Calles con Identidad, Comunicación, Economía y Coyuntura política, Parque Chas recicla y Encuentro de género.
“Este colectivo a mí me cambió la vida. Porque hay muchas mujeres en mi condición, con hijos, de mi generación, que queremos hacer algo y no podemos militar en otro lado, con la responsabilidad que eso conlleva. En este caso estamos en el barrio, nos cuidamos los chicos entre nosotras y nos juntamos a hablar de política, eso lo tenemos claro”, comenta la actriz y directora teatral.
En un ambiente siempre familiar, se reúnen en distintas plazas de Parque Chas, para debatir o concretar acciones, guiso, mate o guitarreada mediante. “Nos hace muy bien juntarnos. Como en el colectivo, la gente sube y baja, hay un porcentaje que va rotando, y no tiene nada de las exigencias de las agrupaciones tradicionales. Nos basamos en una idea muy concreta que es la de construir. Para estos momentos que son tan complejos para muchos, donde se sienten afectados por su realidad, están estos espacios, respetando siempre la democracia y el hecho de que podemos manifestarnos en cualquier lugar”, remata Emilia.
Actualmente, están organizando una charla para abordar la violencia institucional que se ejerce sobre los jóvenes y el rechazo a la baja de la imputabilidad, así como pensando actividades que aborden la problemática de género. Lo más interesante, según cuentan, es cómo la experiencia con el tiempo se fortalece y hasta se replica: en Barrio Rawson ya está comenzando a armarse otro colectivo local.
El denominado barrio Rawson. . .
…está delimitado por el triangulo formado por las calles Tinogasta, Zamudio y Av. San Martín. En este barrio vivió un tiempo de su vida el escritor Julio Cortazar, y una de sus calles lo homenajea. Se destaca por un conjunto de viviendas (edificios de planta baja y tres pisos, y de planta baja y un piso, tipo chalet) construidas entre 1928 y 1934 por la Comisión Nacional de Casas Baratas. Las características arquitectónicas hicieron que fuera declarado como Área de Protección Histórica (Ley N° 3471)