Las noticias policiales encabezan el ranking de las preferencias. En un porcentaje muy alto la única fuente es la propia policía. Vale recordar que en el año 2004 una Comisión Investigadora incluyó en su informe más de cien casos de hechos fraguados por la Policía Federal en connivencia implícita con medios de comunicación.
Por Ignacio Di Toma Mues
Lo ocurrido el viernes 20 de noviembre con una noticia replicada en medios digitales, tanto nacionales como barriales, pone de relieve el “copia y pegue” sobre todo en temas policiales. Las notas eran casi calcadas y la fuente una sola, las fuerzas de seguridad.
La acción de una docente de la Escuela de Educación Especial N° 21 de Villa Pueyrredón logró dar vuelta la página y poner blanco sobre negro acerca de lo ocurrido. El portal de La Nación titulo: “Tiroteo. Policías evitaron el robo en una sucursal bancaria en Villa Urquiza“. Y todas las replicas en “yahoo y google noticias”, redes sociales, etc., pero no hubo tiroteo, ni intento de robo, y la víctima fue un joven con discapacidad mental con un arma de juguete, información omitida por la Policía de la Ciudad.
Las noticias policiales rinden, tienen audiencia, y la audiencia es dinero para los medios. Hace pocos días se conoció un informe de la Defensoría del Público que hizo un estudio de 580 horas y 17.467 noticias que se emitieron desde los canales de televisión abierta: Telefé, Canal 13, América TV, Canal 9 y la Televisión Pública.
Un dato que impresiona: el 39,2% no tenía ninguna fuente identificada y un 40,4% una sola. Según la Defensoría se ubicaron en primera posición entre las fuentes identificadas Internet, videos de televidentes, videos caseros y videos de redes sociales de personas privadas. “Junto con los registros de video de cámaras de seguridad, las fuentes digitales alcanzan casi el 20% de participación en el total” señalaron.
Por otro lado, clasificaron las noticias por su temática. El 17,1% del total fueron dedicadas a temas “policiales y de inseguridad”, que abarcaron el 27,1% del total del tiempo emitido.
Respecto a las causas policiales armadas, no es nada nuevo, sólo que se han agregado formas nuevas de replicarlos, ya sea a través de redes sociales o medios digitales. En 2001 la Procuración General de la Nación armó una Comisión Investigadora de Procedimientos Policiales Fraguados. Entre los fiscales de esta comisión se encontraba el actual juez federal Daniel Rafecas. El informe final, de 2004, incluyó más de cien casos.
“En todos ellos, los patrones eran similares: víctimas con escasas posibilidades de reaccionar frente al sistema penal (mendigos, inmigrantes ilegales, cartoneros, chicos de la calle, inimputables, etc.); que con diversas pretextos eran trasladados hasta el lugar de la trampa; hallazgo “casual” pero “exitoso” de drogas, armas, etc., que permite fabricar un delito grave, frustrado por la policía; y la aparición casi inmediata de los medios de prensa en el lugar” rememora Rafecas en el portal digital Justicia de Primera.
“Era impresionante ver las fotos que los diarios presentaban de los casos detectados: en la abrumadora mayoría se ve al o a los detenidos, recostados boca abajo, con las manos esposadas a la espalda. Claro, son en su mayoría hombres, jóvenes, de piel oscura y vestidos humildemente. La escena del delincuente caído en desgracia es decorada con los objetos secuestrados y algún policía custodiando la escena” dice Rafecas.
Lamentablemente las secciones policiales de una cantidad importante de medios de comunicación se han convertido en Seccionales Policiales.