El reclamo por la incorporación a la carrera profesional de enfermeros y enfermeras ante la Legislatura, el 21 de septiembre, día de la sanidad, terminó con la represión de la policía porteña. “Con el palito de abollar ideologías” como graficara Quino y su personaje Mafalda. Piden la modificación de la Ley 6.035 sancionada en noviembre de 2018.
Por Ignacio Di Toma Mues
La imagen de una enfermera sentada en el piso de la calle Perú, frente a la puerta de la Legislatura, con su cabeza “rota” de un palazo, justamente en el día de la sanidad, da cuenta de la situación que se vive en la Ciudad de Buenos Aires. El diálogo y el consenso pregonado en los medios de comunicación por Rodríguez Larreta lo desmiente la realidad.
Los enfermeros y enfermeras marcharon el 21 de septiembre – día de la sanidad – hasta la Legislatura para entregar un petitorio que exige la modificación de la ley 6.035, sancionada el 1° de noviembre de 2018. Esta norma los excluyó de la carrera profesional de la salud y a pesar de las múltiples manifestaciones nunca fueron tomados en cuenta sus reclamos. El Gobierno de la Ciudad cuenta con la complicidad del Sindicato Único de Trabajadores de la Ciudad (SUTECBA) y de la Asociación de Médicos Municipales.
Desde la Asociación de Licenciados en Enfermería porteña anunciaron que el 1° de octubre realizarán un paro con concentración en el Congreso y movilización a la Legislatura de la Ciudad. Los enfermeros y enfermeras están al frente de la pandemia, con fallecidos e infectados.
Somos profesionales
“Increíblemente los Licenciados en Enfermería, en Instrumentación Quirúrgica y en Bioimágenes no fueron incluidos en esta ley, no nos consideran profesionales de la salud, nosotros, profesionales que trabajamos en los hospitales de la ciudad, estamos como técnicos administrativos” señaló a nuestro medio, en ocasión de la sanción de la ley, la Licenciada en Enfermería Cintia Pérez del Hospital Pirovano.
Esta situación trae aparejada pérdidas salariales, menores posibilidades de capacitación y por consiguiente una menor calidad de atención al paciente. “Nos condiciona a nivel sueldos, no nos reconocen nuestro título que es universitario, y por consiguiente tampoco tenemos las licencias por estrés, cuando nosotras estamos las 24 horas junto al paciente” aseguró.
Uno de los argumentos esgrimidos por el Ministerio de Salud en ese entonces fue que la norma es una ley médica. El artículo 6°, donde se detallan todas las profesiones incluidas, desmiente tal afirmación.
Entre las especialidades incluidas figuran los licenciados en Psicología; Psicopedagogía; Musicoterapia y Musicoterapeutas; Terapia Ocupacional; Trabajo Social y Servicio Social; Ciencias Antropológicas y/o Antropólogos; Sociología; Ciencias de la Educación; Comunicación Social y Ciencias de la Comunicación. Pero no está reconocida la licenciatura en enfermería, instrumentación quirúrgica y bioimágenes.
La solución del conflicto está en manos de Rodríguez Larreta y del Ministro de Salud Fernán Quiros. El artículo 8° de la ley establece que: “El Jefe de Gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires podrá, a propuesta del Ministerio de Salud en consulta con las asociaciones sindicales pertinentes, incluir otras profesiones con título universitario, de acuerdo a las prioridades fijadas por la política sanitaria para el Sistema Público de Salud de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires”.
Sin embargo, Quiros en el programa “Brotes Verdes” (C5N) manifestó que la incorporación de los más de 3 mil licenciados y licenciadas en enfermería está siendo debatida en el ministerio. Y respecto a la represión sólo señaló que se está investigando que pasó. No mostró empatía alguna.