El proyecto inicial de la ciclovía estaba planificado sobre Carlos Antonio López. Ante los reclamos vecinales se relocalizó en Griveo. Nuevas protestas, reuniones en la sede de la Junta Comuna 12 y quejas elevadas al área de Transporte porteño, pero el proyecto ya está avanzando. Ciclistas se pronuncian a favor con el hashtag #SiAlaCicloviaEnGriveo.
Por Juan Manuel Castro
Luego de haber modificado el proyecto original pensado para Carlos Antonio López, el Gobierno porteño avanza con la construcción de una ciclovía sobre Griveo, entre la avenida de los Constituyentes y Chivilcoy. Grupos vecinales se oponen y realizan protestas callejeras para impedirlo, pese al avance de los trabajos.
Mantuvieron un encuentro con las autoridades de la Comuna 12 y elevaron reclamos a la Secretaría de Transporte y Obras Públicas del Gobierno de la Ciudad. En paralelo, grupos de ciclistas se pronunciaron en forma pública a favor de esta nueva vía.
“Griveo tiene tres carriles. En uno estacionan. En otro, el del medio, va a ir todo el tránsito, incluido los colectivos. En el carril para bicicletas van a terminar yendo los autos y las bicicletas van a ir por la vereda”, lamentan vecinos ante este medio al pensar cómo será el panorama urbano una vez que finalicen las obras.
En este sentido, puntualizan tres problemas: el gran flujo de tránsito que desemboca desde Monroe y Blanco Encalada, la circulación de tres líneas de colectivo y la pérdida de espacio para estacionar.
“No estamos en contra de los ciclistas. Estamos a favor de que haya más ciclovías, no consideramos que Griveo sea la indicada porque es una vía rápida, implica un riesgo incluso para ellos”, indica a este medio Betty, vecina de Griveo y Artigas, quien participa de las protestas callejeras.
Del mismo modo, el vecino Mario Ciocca dijo: “La circulación va a quedar en un solo carril, a lo que hay que sumar el tránsito que viene de Monroe, Artigas, Nazca. Es mucho. Con el tema del estacionamiento también vamos a estar sonados. No es como otras zonas donde hay garajes por todos lados. Los vecinos tampoco tienen espalda como para empezar a pagar uno”.
Al consultar a ambos sobre sitios donde, según su parecer, debiera estar esta ciclovía, mencionan José Cubas o Mosconi: “Son anchas, no tenés el tema de los colectivos, es más viable que acá”.
El objetivo del Gobierno porteño es la de ampliar la red de ciclovías para unir Villa Pueyrredón, Villa Devoto, Agronomía, Saavedra y alrededores. Ya existen ciclovías en Nueva York (entre Gutenberg y av. De los Constituyentes), Bolivia (entre Beiró y José León Cabezón), Ceretti (entre Gándara y Larralde), entre otras.
La resolución publicada en el Boletín Oficial del 20 de mayo de este año incluye un total de 24 ciclovías, entre las cuales está la que correspondía en primera instancia a la calle Carlos Antonio López, como extensión de la ciclovía de Blanco Encalada, que se extiende entre Superí y Ceretti.
Este proyecto – originalmente – daba continuidad a la ciclovía de B. Encalada desde Ceretti hasta la Av. De los Constituyentes, continuando en forma paralela a la vereda izquierda de Carlos Antonio López hasta Chivilcoy, y finalmente por Griveo hasta la Av. Gral. Paz.
Pero, en el mes de julio, vecinos frentistas a Carlos Antonio López, tanto de Villa Pueyrredón como Devoto, se manifestaron en contra a través de protestas callejeras. Los argumentos: mucho tránsito, colectivos, poco espacio para estacionar.
Así lo plantearon el 5 de julio al jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, durante una reunión en el colegio Dulcísimo Nombre de Jesús, en Saavedra. Y lo replicaron mediante una petición en la plataforma Change.org. “Que revean esta situación y que la ciclovía sea reubicada en una calle donde no perjudique a nadie, como se ha planteado, por ejemplo, hacerla en la calle Griveo, donde el margen izquierdo esta libre desde hace muchos años” señalaron.
El Gobierno porteño, ante el descontento planteado, reformuló la obra y la relocalizó sobre Griveo. Desde el área de Transporte y Obras Públicas hicieron estudios y, según lo que transmitieron funcionarios a vecinos, las mediciones dieron que es viable tener una ciclovía que conviva con el tránsito.
Cabe destacar que este plan incluye un ciclocarril por Chivilcoy desde la calle Pareja (Plaza Arenales) hasta Av. Gral. Paz, de único sentido de circulación, sobre ambas ramas vehiculares a cada lado del bulevar central. Y también una ciclovía de doble sentido por Nueva York (Plaza Arenales), desde Chivilcoy hasta Gutemberg (estación Libertador del Ferrocarril Urquiza).
La nueva ubicación provocó nuevas protestas. “Esto lo hicieron sin consultar a los vecinos, que somos el termómetro de las calles y somos los que estamos todos los días y vemos si funciona o no”, razona Betty. En paralelo, impulsaron – como pasó en su momento con Carlos Antonio López – una petición en Change.org para detallar los reclamos.
“Griveo es una calle de alto tránsito y angosta, en la que desemboca un gran caudal de autos provenientes de Monroe, que al tener 3 carriles y más capacidad hace que Griveo tenga un gran volumen de autos en forma permanente”, señalaron en la petición subida a Change.org y sumaron: “Toda esta situación se agrava, si tenemos en cuenta que por la misma calle Griveo tienen su recorrido las líneas de colectivos 107, 114, y 90, y más aún que tanto bomberos como ambulancias usan esta misma calle como vía de acceso rápido”.
“En los cruces de Griveo y Artigas, y Griveo y Av. Nazca, actualmente, hay horarios pico donde se forman 200 metros de congestionamiento de tránsito y embotellamiento, no hace falta describir que para una calle interna de barrio esto genera caos y una alta exposición a choque de vehículos, como también contaminación acústica y visual”, añadieron.
Del mismo modo, sugieren que una ciclovía en Griveo propiciaría siniestros viales: “La situación descripta con la incorporación de la ciclovía lejos de tenerla, la empeoraría gravemente, ya que la misma generaría reducción del espacio a un solo carril, lo cual en el día a día se traduce en mayor embotellamiento y caos en la vía pública. y esto último no sería lo más grave, sino poner en riesgo la vida de las personas, tanto de automovilistas, pero más aún peatones y ciclistas”.
Con otros ojos ven esta situación distintos colectivos de ciclistas. Anoticiados sobre el cambio de Carlos Antonio López a Griveo y el rechazo que hubo y hay en ambas, desde el colectivo Bicivilizadxs (@bicivilizados) expresaron: “Vamos a tener que hacer algo. No quieren nada. Sí a la ciclovía que puede conectar cinco barrios”.
Con el hashtag #SiAlaCicloviaEnGriveo sumaron: “Porque quiero llegar más rápido a mi trabajo, al colegio, a hacer mis compras, quiero tener la libertad y la seguridad de moverme sin que me toquen bocina y me tiren el auto encima”.
“La ciclovía da un carril para circular en bicicleta a las personas que antes no se animaban a usar la bicicleta para todo, queremos carriles exclusivos para bicicletas porque los automovilistas nos tiran los autos encima, no nos respetan las personas no se animan a circular”, expusieron.
Al cierre de esta edición, vecinos que están en contra de los trabajos en Griveo se reunieron con el presidente de la Junta Comunal 12 Gabriel Borges en la Sede Comunal de Monroe y Holmberg. “Plantearon sus inquietudes y de ahí se elevan al área de Transporte”, dijo el funcionario a este medio.
“En la Comuna nos recibieron bárbaro, pero se notó que se trata de un tema que no depende de ellos, sino del Gobierno porteño directamente”, lamentaron los vecinos, quienes se mostraron con poca esperanza de ser escuchados.
Pese a todo, planificaban continuar con los reclamos callejeros. “Estamos activos para difundir lo que pasa en toda la traza”, concluyeron.