Cercano al comienzo de la década de 1920, un joven contador público de nombre Antonio Luis Vaccaro, compró unos lotes en Villa Pueyrredón. De origen porteño, vivía en el barrio Retiro. A partir de entonces, se irían cumpliendo varios de sus sueños, con proa a un nuevo barrio.
Antonio Luis no fue solo
Los lotes recién comprados eran visitados los fines de semana junto a Victoria, con quien se casaría en noviembre de 1921. Estas parcelas, se encontraban dentro de la manzana delimitada por las calles Argerich, “Timbó” (hoy, Carlos Antonio López), pasaje Joaquín Castellanos y “av. América” (hoy, Mosconi).
A Antonio Luis, además de su profesión, le gustaba cultivar, cuidar el jardín y la huerta. De esta forma entre proyectos y esperanzas, se plantaron árboles frutales, ligustros, jazmines, enredaderas, etc.
Sus padres, Don Juan Vaccaro y Asunta Roccatagliata, eran de origen italiano, a ellos les propuso mudarse allí y construir su hogar, en esa misma manzana.
Una foto con sol de frente, aparece Victoria, sonriente en el medio de sus suegros. Nótese el detalle del largo de las faldas. Esto nos hace suponer que se trata alrededor de los años 1918/19.
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La casa grande
Antonio Luis, deja en las manos de un constructor, también de procedencia italiana, el proyecto de edificar una casa de dos plantas. Contamos al día de la fecha, con este impecable patrimonio edilicio, fácilmente distinguible desde las veredas de Argerich 4747. En el frente podemos identificar y leer su nombre: “A. Gasparutti”. La letra “A” es la inicial del nombre Ángel. Fue nada más y nada menos que el hermano de Maximino Gasparutti, quien construyó el cine-teatro “25 de mayo” en 1929, casas en barrio Villa Urquiza, etc.
A su vez, hemos encontrado otra vivienda edificada por un tercer hermano: Santiago Gasparutti, quien firmó la obra con su nombre completo, en Villa Pueyrredón (en José L. Cabezón al 2600). Así observamos en el diseño de Santiago, similitudes en estilo y ornamentación con los otros dos hermanos.
Fachada de una casa en Villa Pueyrredón, construida por Santiago Gasparutti, en José L. Cabezón al 2600
Ni un solo ladrillo hueco
Sin lugar a dudas, la fotografía era uno de los gustos del matrimonio. Aún sus nietos conservan la antigua máquina de fotos que registraron escenas, las cuales nos han compartido. La siguiente imagen ejemplifica la casa, con los ladrillos a la vista, desprovista aún del revestimiento y de la elegante decoración que la distingue.
Sobre el balcón inconcluso, en la foto de época, se destacan en el lado derecho el joven matrimonio, entre otros adultos y dos niños. Allí estuvo ubicado el dormitorio principal. Ésta será por siempre, la vivienda de Antonio Luis y Victoria.
Entre andamios, “un galponcito” de chapas y rejas por instalar.
Dos fotos, tomadas para esta nota, con detalle de la firma del constructor (en el ala derecha del frente).
El jardín soñado con sus protagonistas
Los dos siguientes retratos, fueron tomados con diferencia de pocos años. Observamos a Victoria con sus hijos: Antonio y Jorge, su hermano mayor, montando un blanco caballito criollo. Por la presencia de esta peculiar mascota, había una caballeriza, en el amplio fondo de la casa. Además una casita donde vivían los caseros (un matrimonio), según nos relató Mariela, nieta de “los Vaccaro”.
Las dos imágenes nos muestran, el pulmón de manzana, unos años después de la inauguración de la propiedad. Canteros, un rosal, ligustros podados, una pérgola, un “sube y baja”, que dan cuenta de sueños cumplidos.
Victoria Margarita, fue la más pequeña de los hermanos. Pintó un cuadro de la fachada de su casa natal, en año el 2013. Hoy, su hija, comparte esta obra de arte, de una persona muy querida e inolvidable.
Paralelamente, en los comienzos de esta historia de “Lotes en familia”, una hermana de Antonio Luis: de nombre Esther, contrajo matrimonio. Esta nueva pareja, fue propietaria de una de aquellas parcelas. El ingreso principal a este nuevo hogar fue desde el pasaje Joaquín Castellanos. En la actualidad, Osvaldo, uno de los hijos de Esther, vive en este lugar.
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Aquí, damos fin a esta historia que ha cumplido un poco más de 100 años, en un lugar estratégico del barrio Villa Pueyrredón y que aún está muy presente en el recuerdo de vecinos y amistades. Agradecemos la infinita generosidad de la familia Rodríguez Vaccaro, por haber compartido estos recuerdos.
Sobre la autora de la nota: María Fernanda Gómez. Tecnicatura en turismo, Universidad del Salvador. Guía de turismo, Instituto Superior Perito Moreno. Ciudad de Buenos Aires.
Fuentes
- “Cines de Buenos Aires”. Patrimonio del siglo XX. Marta García Falcó y Patricia Méndez
- “Las calles de Buenos Aires”, de Alberto G. Piñeiro. 2005