En los últimos días de la gestión de Rodríguez Larreta se le otorgó al ex jugador de Boca Juniors Sebastián Battaglia más metros cuadrados del polideportivo Sarmiento en Saavedra. Denuncian canon irrisorio y la Inspección General de Justicia advirtió por graves irregularidades y calificó a la empresa concesionaria como “ficticia”.
Por Mateo Lazcano
En los ocho años de la gestión de Horacio Rodríguez Larreta, en el Parque Sarmiento reinó la dejadez y las privatizaciones. Pese a las críticas opositoras, y entre gallos y medianoches, se fueron entregando partes del polideportivo para negocios privados.
La más reciente ocurrió en pleno debate electoral, cuando se otorgó a una empresa del ex jugador de Boca Juniors, Sebastián Battaglia, la licitación para renovar sus “canchitas” y sumar otras. A fines del mes de noviembre la Inspección General de Justicia solicitó la disolución de esta sociedad y puso un freno a esta entrega. Los ojos están ahora puestos en cómo reaccionará el organismo bajo la conducción nacional de Javier Milei.
Organizaciones vecinales fueron denunciando la entrega en concesión, a un canon irrisorio, de distintos predios del polideportivo, el área verde más grande de la Comuna 12 con 42 años de historia.
El desarrollo de la academia de fútbol “SB5” fue probablemente la más obscena. Transcurría 2019 cuando visitantes regulares del Parque Sarmiento comenzaron a detectar obras sin ningún tipo de cartel informativo. Ante la viralización del tema, el Gobierno porteño dio a conocer los detalles de la cesión a la Asociación Civil “IDES”, para el uso precario de 14 mil metros cuadrados del predio. Esta asociación tiene como integrante a Sebastián Battaglia, ex jugador de Boca Juniors y amigo personal de Mauricio Macri.
Rápidamente “SB5” comenzó a funcionar con canchas de fútbol 5, 6, 8, 9 y hasta 11, con estacionamiento, vestuarios y un bar. Todo en una zona en la que antes había canchitas de cemento de fútbol y básquet, y otras de césped, ahora alambradas tras la reconversión en un lugar de acceso pago. El valor del canon permaneció con modificaciones irrisorias. En 2021, por caso, estaba en 10.000 pesos mensuales, una cifra que la concesionaria recaudaba en un día.
Las quejas de las organizaciones vecinales por las irregularidades en la concesión, y de vecinos de la zona, por el movimiento de entrada y salida de autos y que el lugar funcionará hasta la medianoche todos los días perturbando la zona por el “griterío” no hicieron mella en el gobierno porteño.
Tampoco la muerte de un reconocido entrenador de fútbol, Alberto Pascutti, que sufrió un paro cardíaco mientras presenciaba un torneo amateur. No pudo ser atendido en el lugar por la falta de un desfibrilador.
La nueva concesión
El 24 de octubre de 2023, se publicó en el Boletín Oficial la adjudicación de la “concesión de uso y explotación de carácter oneroso de dos (2) espacios ubicados dentro del Parque Sarmiento” por cinco años a favor de la firma Locura Deportiva SA. En esta licitación habían participado otras dos empresas: Sarah SA y Mundo Fútbol SA.
Al frente de Locura Deportiva nuevamente está Battaglia. El canon mensual inicial es de 11 millones de pesos, una cifra cuestionable si se considera que en diciembre el alquiler de una hora de canchita de fútbol 5 se cobraba 30 mil pesos.
De los dos espacios entregados en concesión, uno pertenece a la anterior concesión – la del 2019 – que abarca 14.000 metros cuadrados donde ya están las canchitas, el bar, vestuarios y además permite agranda la parte de los estacionamientos, con la suma de otros 3.900 metros cuadros más.
Además, está un segundo espacio de 4.428 metros cuadrados situados próximos a la avenida Triunvirato, frente al predio del Club Platense y el salón de fiestas “El Abierto”. La propuesta es construir cinco canchas de paddle, con vestuarios y bar.
En ese lugar actualmente existen canchas de tenis de cemento en estado de abandono, repitiendo la lógica de toda la gestión del Gobierno de la Ciudad para el parque: del abandono a la privatización.
Con esta cesión, Battaglia pasaba a administrar más de dos hectáreas totales del Parque Sarmiento. Además, debemos sumar las canchas de rugby del Club Belgrano Athletic, la pista de bicicross de la Asociación de Ciclismo y las canchas de tenis de Omar Carminatti, entre otras concesiones.
Denuncia de irregularidades
A fines de noviembre, a días del del cambio de gobierno a nivel nacional, la Inspección General de Justicia (IGJ) pidió la «inmediata disolución y liquidación» de Locura Deportiva S.A., la empresa encabezada por Sebastián Battaglia que se presentó para gestionar los 22.328 metros cuadrados en el polideportivo de Saavedra.
La IGJ detectó “irregularidades”, entre ellas, la «insuficiencia y falsedad» de los estados contables y la «inexistencia de sede social efectiva» de la firma. El organismo la catalogó como una sociedad «ficticia», dentro de lo previsto en el artículo N°19 de la ley de sociedades comerciales, que habla de «una sociedad con objeto lícito, pero actividad ilícita».
Destacaron que nunca se habían presentado las tasas anuales de pago ni los papeles que se requieren desde lo contable para funcionar, y que recién lo hicieron al iniciarse la investigación.
También se detectó que el domicilio presentado como sede social, en Núñez, estaba alquilado a un tercero, quien expresó no conocer a Locura Deportiva. «Nadie puede interactuar con ella, como tampoco ubicarla en sitio alguno», planteó la IGJ, y dedujo que la «inexistencia de sede social efectiva hace presumir que la sociedad no desempeña actividad alguna”.
Las Memorias, otro documento necesario, «no cumplen ni remotamente con lo dispuesto por el Artículo N° 66 de la Ley 19.550 de Sociedades Comerciales» señaló la IGJ, al no contar “con la firma del representante legal de la sociedad», ni dar cuenta de gastos, costos, impuestos o tasas. Mientras que la empresa omite dar explicaciones sobre sus ganancias, que no se condicen con los activos iniciales.
¿Qué puede pasar ahora?
Para el titular de la IGJ, al momento de la investigación, Ricardo Nissen, cuesta encontrar explicaciones de por qué le dieron la concesión a esta empresa. “Es absolutamente inviable que una sociedad no haga sus balances» dijo al ser consultado por la prensa tras la presentación de la denuncia. No obstante, su organismo no tiene potestad para anular la decisión del Gobierno porteño, aunque realizó una presentación ante la Justicia con el detalle de las irregularidades.
Los ojos están puestos ahora en cómo actuará la Inspección General de Justicia, a cargo del jurista Daniel Roque Vitolo, nombrado por el ministro Mariano Cúneo Libarona. “La Justicia tiene que resolver el pedido de la IGJ, aunque también ellos pueden desistir de la acción judicial”, adelantó Jonathan Baldivieso, titular del Observatorio por el Derecho a la Ciudad y una de las voces cantantes en el reclamo contra la concesión de 2019 y la actual.
El otro tema a seguir con atención es si habrá algún cambio desde el Gobierno de la Ciudad, bajo la jefatura de Jorge Macri, que, si bien sigue siendo del mismo signo político, busca despegarse en este primer tiempo de algunas de las cuestiones más polémicas del larretismo.